Humedece tu cabello y sécalo con una toalla. Las
puntas son las más fáciles de peinar cuando el cabello está ligeramente
húmedo. Para lograrlo, puedes tomar una ducha o humedecer el cabello en
el lavamanos. Una vez mojado, frota el cabello con una toalla hasta que
esté casi seco. Evita usar una secadora de pelo para que los mechones no
se encrespen.
2. Peina el cabello en la dirección que vayan las puntas.
Usando tus dedos y un peine, peina el cabello en la dirección que
tendrán las puntas. Este paso lo preparará para la aplicación de una
crema mate.
3.
Aplica la cantidad de una moneda de diez centavos de crema mate.
Cuando se trata de crear puntas, evita usar gel, ya que puede ocasionar
que el cabello luzca mojado y grasoso. En lugar de eso, coloca la
cantidad de una moneda de diez centavos de crema mate en tu palma,
espárcela frotando tus manos, y pásala a través del cabello en la
dirección que tienen las puntas. Para asegurarte de que puedas peinarlo
correctamente, cubre cada mechón minuciosamente.
4. Usa un peine para doblar las puntas. Después de
aplicar la crema mate, puedes usar un peine para doblar las puntas.
Simplemente jala el peine desde la parte inferior de un mechón hasta la
parte superior, dejando que se mantenga en el aire. Si es necesario,
utiliza tus dedos para moldear formas más específicas. Cuando las puntas
estén hechas, déjalas secar naturalmente o usa un espray para el
cabello para endurecerlas de forma rápida.
- Para las puntas pequeñas, usa un peine de dientes finos o ásperos.
- Para las puntas largas, usa un peine de dientes anchos.